El águila perdicera es otra de las rapaces más comunes en Villanueva del Arzobispo, donde aprovecha nuestra sierra para nidificar.
De menor tamaño que la imperial e ibérica, el águila perdicera se diferencia de las anteriores por tener el pecho en una tonalidad blanca, diferenciándola claramente de las anteriores. Su envergadura con las alas abiertas es de 170 centímetros y unos 70 centímetros de alta.
Se alimenta, como su nombre indica, de perdices,aunque también preda sobre conejos y liebres, pequeños mamíferos, otras aves e incluso reptiles, sin descartar carroña si fuera necesario.
El águila perdicera se encuentra en el norte de África, en escasas ubicaciones del Mediterráneo y en Asia. En España se considera una especie en grave peligro de extinción, habiéndose reducido drásticamente el número de ejemplares en el norte de la península y encontrándose algo más estable en el sur. En Villanueva del Arzobispo la podemos encontrar todo el año.
Curiosidades: las parejas de águilas perdiceras se comportan como una auténtica familia y son ejemplo de unión. La hembra es la encargada de empollar los huevos y posteriormente de defender el nido y sus polluelos. El macho será el encargado de buscar comida, llevando a sus retoños y su pareja al menos tres presas diarias, alimentando así a su familia, incluida su pareja.
